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Creí que el odio se había acabado, pero solo ha estado tomando un descanso.




Después de haber publicado un tweet, con el cuál critiqué duramente, pero con respeto, la posición favorable a despenalizar al aborto que tiene Alondra Santiago, (periodista cubana que simpatiza muchísimo con el régimen de Rafael Correa) recibí muchísimas opiniones y críticas, unas a favor y otras en contra, las cuáles han sido bienvenidas, ya que a las críticas constructivas se las debería considerar como consejos y las destructivas como tirón de orejas.

Traté de dar respuesta a todas las opiniones en el mismo tono en el que venían, pero no fui capaz de exceder ese límite del respeto, aunque muchos no lo merecen, pero mantuve mi compostura por consideración al resto.

Creo que el uso de la palabra promiscua fue la que desató la furia de muchos, fui mal interpretado, hubo hasta una acusación que insinuó pedofilia, sin dejar de lado una serie de insultos, improperios, descalificaciones nada creativas, provenientes de personas, muy muy resentidas, mal pensadas y con la conciencia súper cochambrosa.

Mis palabras están dirigidas, (recalco en el están dirigidas porque no borraré el tweet, al contrario, me hago responsable de todas sus letras y seguiré poniendo el pecho a las balas) a que cuando una adolescente queda embarazada no solo es porque ha sido violada, también hay aquellas que cometen actos sexuales, consensuados con sus novios que también son menores de edad, por eso dije que son víctimas de su precoz y promiscua travesura, ya que conozco una pareja de amigos de mí misma edad, que en las vacaciones del verano cuando yo pasaba a 2do curso, se convirtieron el padres y vivieron felices durante 25 años más, sin haber recurrido a un aborto. Me acuerdo bien de la época porque fue cuando se celebraba el Mundial de fútbol Italia 90.

Hubo también un pañuelito verde que coincidencialmente simpatizan con estas ideologías que coquetean con el SSXXI y se hacen llamar progres que osadamente me dijo:

No te veo adoptando niños, ni haciendo activismo para adopción, pues a esa iluminada le digo: no he adoptado a un hijo porque Dios me ha dado los que necesito y me hago responsable de ellos en todo lo que me concierne, no empujo programas de adopción, pero hacer activismo para que el asesinato de un indefenso e inocente ser humano sea considerado un derecho creo que es de lo más ruin y abominable.

Otros se atrevieron a citar estadísticas, que son poco fidedignas, ya que no se sabe a ciencia cierta cuantas adolescentes han muerto por practicarse abortos de manera clandestina, y claro, que esas estadísticas son importantes, pero no se asemejan a las estadísticas verdaderas que si estoy seguro de que existen de las mujeres que mueren por cáncer de mama, de útero o de otras enfermedades.

Pensé que el odio se había acabado, pero solo ha estado tomando un descanso, ya que, para mi sorpresa, todas las denostaciones, galimatías e insultos venían de los simpatizantes del correismo, hecho descubierto al revisar muchos de los perfiles de los insultadores que interpretaron mis palabras a su maldita realidad, donde cabe perfectamente el viejo refrán que dice: cada ladrón juzga según su subnormal condición.

La investigación realizada a los perfiles de varios de estos hijos de las innombrables e impolutos inquisidores, que no están heridos u ofendidos por lo dicho a las adolescentes a las cuales yo posiblemente ofendí sin querer, ya que en realidad estaban ofendidos porque critiqué a la periodista vocera del correismo que quiso denostar las palabras de Guillermo Lasso la noche en que se dio los resultados de las elecciones.

En fin, cada uno es libre de tomar la decisión que crea conveniente, yo no como hombre puedo imponer mi posición al resto, pero sí de mi depende jamás permitiría que se practique un aborto salvo por casos de violación o porque la vida de la madre corre peligro.

Con la despenalización del aborto no estamos atacando al verdadero problema, estamos fijándonos en las consecuencias solamente y le damos un triunfo al:

El violador de menores que hará abortar a su víctima para evitar problemas

El mal hombre que embaraza a su amante y le hace practicar un aborto para evitar que la esposa se entere.

El marido que bajo la justificación de no tener los recursos necesarios para mantener a un hijo le haga abortar a su pareja.

¿Quieren hacer activismo para que no haya mujeres muertas por abortos clandestinos?

Denuncien al violador

Hagan algo para que las sanciones a los violadores sean radicales como por ejemplo una castración.

En vez de pedir aborto gratuito, pidan vasectomía o ligadura, eso sí es decidir sobre su cuerpo solamente.

Programas de educación sexual en las escuelas y colegios, pero educación sexual y no ideología de género.

Adjunto el link del caso para que juzguen y si están a favor o en contra expresen su opinión con altura y respeto, bajo ningún concepto se aceptarán insolencias.

https://twitter.com/saomargarciavi/status/1382690022432894982?s=20


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